hoy no soy yo, soy tú, me permito violar las reglas para gritar sin voz, sé que comprenderás...
palabras duelen cuando las leo, imágenes a mi cabeza por doquier, confusión, dudas y muchas preguntas me atacan a la vez, sé que no puedo con todas, pero lo intento, créeme que lo intento. No soy más que el que se manifiesta a través de las letras, con y sin voz, pero sabemos que es una verdad a medias, que soy yo más allá de todo eso, que hay sentimientos que no salen a la luz, a veces porque no quiero, a veces porque no estás, pero son aunténticos lo sé (lamentablemente sólo para mí) y se quedan en los espacios que les brindo...
hoy vinieron casi en el final, tras mi afán de cuidar lo que no me corresponde, por pecar de valentón, no nos equivoquemos, que por momentos no es claro lo que escribo, hay mucho de mí ahora (no estás porque te dejé encerrado) cuando vuelvas a ver te darás cuenta del alboroto que aquí he plantado, me dirás que soy exagerado, que parezco una niña, y tus palabras calzarán porque es tu espacio, son tus reglas, hoy soy un invasor, me tomé un respiro para decidir, vaya que fue corto! salté sin más de por medio.
el golpe (el cambio brusco) dólio y mucho, no estaba preparado, lo sé, lo sé, uno nunca está preparado, pero cuánto hubiera querido estarlo, para no sentir la fuerza de ese aventón, con tan pocas fuerzas me dejó que no pude volver a levantarme, no al menos hoy, tendré que ser más cauto la próxima vez? quizá, pero no quisiera llenarme de clichés, no me soportaría... habrá silencio para reponer las fuerzas perdidas, habrá tiempo consumido, palabras rotas y un par de lágrimas anónimas, habrá mucho de mí, lo siento...
hoy escribo, hoy te devuelvo la invasión...
