domingo, abril 19, 2009

Crónica de resaca inexistente


18 de abril, metido en mi memoria desde que tengo conciencia de los recuerdos, es el momento de añadir un número más a mi edad, testimonio de 365 días en los que abrí los ojos después de cerrarlos para dormir, días en los que comí -más de la cuenta- corrí -menos de lo que hubiera querido- sudé, lloré, reí y, sobre todo pensé... mi oficio favorito

testimonio de una cena adelantada -que quise pagar pero no me dejaron- con recuerdos que superan mis dos dígitos, música de antaño y anécdotas recurrentes

testimonio de un almuerzo inmejorable, en compañía de mi sangre, con recuerdos también y risas incluidas

testimonio del brindis amical, del sitio añejo, de las catedrales de pisco, planes de viajes, y más recuerdos... una cena que casi no fue y más planes de viaje

Un domingo feliz, con amor, comida y caminata

Para recordar el siguiente año